HISTORIA DE YAULI
CREACIÓN:
El distrito de Yauli, fue creado en el gobierno del presidente Ramón Castilla el 7 de noviembre de 1847 mediante, con Ley N° 6468, perteneciendo a la provincia de Jauja. Al crearse la Provincia de perteneciendo a la provincia de Jauja. Al crearse la Provincia de Tarma pasó a forma parte de ella y luego al crearse la provincia de Yauli, el 10 de diciembre de 1906 mediante Ley N°459, pasó a ser parte de la misma.
UBICACICIÓN GEOGRÁFICA:
El distrito de Yauli se encuentra ubicado en la sierra de la región central del país, con una topografía bastante accidentada, a orillas del Rio Yauli.
LIMITES:
Se tiene los siguientes límites geográficos:
Norte, con el distrito de Morococha y Santa Rosa de Saco
Sur, con el distrito de Suitucancha
Este, con el distrito de Huay-Huay, Suitucancha y Provincia de Yauli -La Oroya
Oeste, con la provincia de Chicla y San Mateo (Provincia de Huarochirí – Lima)
Sur Oeste, con el distrito de Huay-Huay
La altitud de la capital distrital es de aproximadamente de 4,100 m.s.n.m, con una superficie total de 424.16 km2 (Plan de Desarrollo Concertado del Distrito de Yauli 2007-2011)
Vista panoramica de Yauli
LUGARES TURISTICOS
Es una laguna de montaña que cubre un área de 21.40 km², con una profundidad de 12 metros y una capacidad de almacenamiento de 11.69 mil m³. La temperatura promedio es de 8°C. Esta laguna se destaca por su belleza natural, con aguas cristalinas que reflejan el cielo y está rodeada de cerros. Alberga una rica biodiversidad, incluyendo aves, felinos, y una gran variedad de plantas, con más de 150 especies vegetales identificadas en su entorno. Algunas plantas tienen usos medicinales o culinarios en la gastronomía andina. Entre la fauna, se encuentran especies como el pato zambullidor, la gaviota andina, y ranas.
En el distrito de Yauli, existen evidencias de que los incas ya explotaban minerales antes de la llegada de los españoles, quienes luego establecieron mitas mineras y construyeron fundiciones como la de Uqrucancha para procesar oro y plata. Estos hornos, ubicados a 4,400 metros de altura, aprovechaban la fuerza del viento y la leña de quiñuales como combustible. Otros hornos similares se construyeron en Santa Bárbara y el cerro Jerusalén. A pesar de su potencial como atractivos turísticos, estos sitios históricos están abandonados. La fundición de Santa Bárbara, particularmente activa durante la Época de la Independencia, fue gestionada por la familia Valentini y se especializó en la producción de oro, cobre y bronce. Los minerales utilizados provenían de la Cordillera de los Andes, y los conocimientos de orfebrería inca se basaron en técnicas heredadas de los Chimus.
El texto describe la primera fundición en la zona de Vicharayoc, utilizada por los españoles para fundir oro y plata durante la época colonial. Esta fundición incluye restos de un edificio y casas cuevas que probablemente sirvieron como alojamiento para los trabajadores. Debido a la dificultad de aplicar técnicas europeas, los españoles usaron los hornos de viento o Wayras, operados por indígenas expertos en refinación de metales, conocidos como Yanaconas Wayradores. Estos indígenas controlaron la producción de plata entre 1550 y 1570, hasta que fueron reemplazados por el uso de azogue para la purificación del mineral. Los habitantes andinos de Yauli se convirtieron en hábiles mineros y metalurgistas, desarrollando métodos avanzados para la extracción y manufacturación de metales, como se evidencia en los hornos artesanales de la época.